Cuando nos hicimos Socios en DVC


Era el verano de 2014. Teníamos 2 hijas, de 2 y 1 año. Después de que mucha gente nos dijera que eran muy pequeñas para disfrutar de Disney, yo estaba segura de que lo disfrutaríamos mucho, pues yo soy de Orlando y crecí con los “pases anuales” por años. 

Después de un poco de labor de convencimiento, mi esposo y yo, empezamos a planear nuestro primer viaje a Disney en Marzo del 2015 (las niñas tenían ya 3 y 2 años). Decidimos quedarnos fuera de la propiedad, usando un tiempo compartido. Rentamos un coche y planeamos manejar a los parques porque los horarios del servicio de autobús no nos era funcionales. ¡Será genial! Pensamos.

Llegamos al resort, por supuesto, nos “invitaron” a pasar a una presentación (de ventas). Ok, dijimos…¿por qué no? Cuando nos vimos en el lobby con nuestras dos pequeñas hijas, pasó más de una hora y nadie nos atendió. Después de mucho discutir con la gente de ventas, niñas llorando, un día perdido, etc. …nos marchamos. 

Estábamos paseando por Magic Kingdom y nos detuvimos en un pequeño mostrador de DVC (Disney Vacation Club). Aprendimos todo acerca del programa y mientras nuestras dudas crecían, nos preguntábamos si existía otra manera de ser parte del club. Terminamos por buscar en reventa y pensamos que eso tenía más sentido para nuestra familia, ya que no estábamos interesados en Disney Adventures y no le encontramos sentido a usar nuestros puntos para reservar cruceros. 

Regresamos a casa después de unas mágicas y maravillosas vacaciones, las siguientes 3 semanas nos dedicamos a investigar acerca de las reventas de DVC por horas y horas. Después de un par de hojas de cálculo y jugando con los números, nos decidimos por Boardwalk.

Nuestra primer estancia como Socios DVC fue en Diciembre del 2015. Mientras que mi esposo no estaba del todo convencido y a mí no me impresionaba Boardwalk, no podíamos negara la excelente ubicación. ¡Estar dentro de la propiedad, tener acceso a los autobuses y a los botes (que pasan cada 20 minutos), el poder caminar a Hollywood Studios y a Epcot, nos hizo a todos muy felices! ¡El poder caminar por la parte de atrás de Epcot a diferencia de estar haciendo filas en la entrada principal, es simplemente increíble!

¡Esto fue algo que acabó de convencernos y decidimos comprar más puntos en reventa!

Durante este viaje, la más pequeña de mis hijas y yo acabamos con un ligero dolor de estómago, pero todo el personal de Boardwalk estuvo increíble, nos atendieron muy bien. Mi esposo se llevó a mi hija mayor a los parques, en lo que nosotras dos éramos atendidas. Al siguiente día,  ya estábamos todos juntos divirtiéndonos en los parques. 

¡En este viaje, hubo tanta magia! ¡Cada vez que caminábamos por uno de los kioskos de DVC, las niñas acababan con muchas calcomanías y ni siquiera sabían que éramos Socios DVC!

¡Una noche, tomamos el autobús de regreso a Boardwalk, cuando llegamos a nuestro lobby, Mickey & Minnie estaban ahí vestidos con su traje navideño! Tuvimos la oportunidad de pasar tiempo con ellos y nuestras hijas estaban muy emocionadas después de todo lo que vieron en el día. ¡Ahora tenemos fotografías y recuerdos que nunca olvidaremos gracias a DVC!

¡Este no es el final de nuestra aventura por DVC, estén atentos para enterarse de nuestro próximo viaje!