No hace mucho llevamos por primera vez a Disney, a nuestra pequeña nieta de 2 años, Grace y a Bodhi, nuestro nieto de 5 meses. Quién dice que un niño de 5 mese es muy chico para ir? Solo vean su cara al ver al personaje en el desayuno del Polynesian. Compramos no hace mucho una membresía de Disney a nuestros 68 y 70 años respectivamente, y saben? Nunca se es demasiado viejo para disfrutar Disney. También compramos en reventa para el mismo mes y año de uso en el mismo resort. Nuestro plan es dárselo a nuestro hijos, para que tengan muchos años diversión con sus hijos. Mi esposo y yo estaremos creando muchos recuerdos propios mientras disfrutamos de nuestra jubilación. No puedo esperar, a que llegue el Festival de Vino y Comida, los safaris, las noches llenas de magia y demás festividades que tanto los socios del Club Vacacional Disney (DVC – Disney Vacation Club) como sus visitantes pueden disfrutar.
Mi consejo para ustedes, es primero comprar una cantidad pequeña de puntos directamente de DVC y el resto en reventa. Todo se puede hacer fácil en línea sin siquiera contactar a un agente. En nuestro caso, fue muy sencillo y planeamos hacerlo otra vez en el futuro. Nos mantenían informados en cada paso del proceso y fue realmente sin mayor esfuerzo. Ahorramos muchísimo dinero al comprar en reventa.
Nuestra idea es hospedarnos en diferentes resorts y que algunas de esas vacaciones sean en estancias fuera de los parques. Queremos ir en diferentes épocas del año, ya que nunca hemos visto las decoraciones de Halloween o Navidad. Y todo esto es gracias a que somos parte del club de socios de DVC, porque de otra manera sería muy difícil lograrlo.
Nos estamos haciendo a la idea de invitar a nuestro hijo y a su novia, quienes nunca han ido, solo ha ido nuestro hijo el mayor con su esposa y sus cuatro hijos. Nos encantaría ver sus caras, va a ser todo un suceso.
Sí, seguramente será un mar de emociones, pero el tiempo con la familia no tiene precio, no puede ser medido. Esperamos que los recuerdos perduren mucho tiempo, aun cuando ya nos hayamos ido. El poder desayunar con ellos todas las mañanas y tener una habitación de dos recámaras; el ver sus caras cuando se suban por primera vez en el monorriel y verlos entrar a Magic Kingdom, luego a Epcot, a Galaxy Edge y a Hollywood Studios es algo que se me quedará grabado para siempre. El disfrutar de los diferentes festivales, los fuegos artificiales, o el simple hecho de relajarse en la alberca, mientras estés en familia, eso es todo lo que importa. Y Disney es familia. Desde el momento en que llegas al resort, y la manera en la que te saludan con un “bienvenido a casa”.
Si bien mi cuerpo ya no está para divertirme con ellos en las albercas, al menos podré ver como disfrutan los toboganes, los paseos en bote y las comidas con los personajes.
Esto nos va a dar una vida llena de recuerdos y tal vez algunos se compartan de padres a hijos. El saber que nuestros hijos y nietos podrán disfrutar de algo, aun cuando nosotros ya no estemos, nos da la sensación de pertenecer a algo aunque ya no estemos.