Las habitaciones tipo Estudios en DVC han cambiado la forma en que come nuestra familia (y pasamos el tiempo) en Disney World.


Hemos visitado Walt Disney World por muchos años…

inicialmente como una pareja y ahora como una familia de cuatro: dos adultos y dos niños. A lo largo de estos años, nuestra forma de vacacionar ha cambiado mucho. Al principio íbamos por un par de semanas, después de acuerdo a nuestras finanzas, extendimos este periodo a 3 semanas. Ahora podemos estar por un período más prolongado, ya que nos hospedamos en las habitaciones tipo “estudio” con nuestra membresía DVC (Disney Vacation Club) aparte del ahorro que logramos en comidas. 

Una de las ventajas más grandes que ofrecen las habitaciones de DVC (Disney Vacation Club) son las instalaciones dentro de la habitación, para preparar comida, lo cual se traduce en ahorro. Esta es una de las razones más importantes para nosotros los visitantes de Walt Disney World, provenientes del Reino Unido, ya que así nos podemos quedar por más tiempo. Esto porque podemos comprar comida y prepararla en nuestras habitaciones y así no tenemos que pagar los precios de los parques y restaurantes, haciendo que nuestros presupuestos duren mucho más. No me malinterpretes, de forma esporádica nos permitimos alguna comida en las instalaciones, sin embargo, hay una sensación de “importancia” (o la falta de) que sentimos dentro de nuestra familia (niños incluidos) cuando vamos a un restaurante y pagamos cerca de $60 USD por tiras de pollo y/o hamburguesas para los cuatro. 

Antes de que estuviéramos en DVC, nuestro paquete de vacacional consistía de hotel, entradas al parque y el uso de “la oferta” (Disney lo llama “gratis”) para comidas, la cual se usa para animar a los visitantes del otro lado del mundo. Esto parecía una buena oferta, porque así, no tenías que pensar en dónde ir a comer, ni de lo que costaría, pero la familia creció y también nuestros hijos, nuestros hábitos cambiaron – descubrimos que el “plan de comidas” tenía mucho para nosotros! Siendo originarios del Reino Unido, descubrimos que comíamos mucho menos en Florida que en casa, yo creo que es la combinación del calor y lo que se ofrece en el “plan de comidas” –  no se nos antoja un pastelito esponjoso de chocolate o una tarta de queso como postre con cada comida que hagamos. En uno de nuestros viajes, teníamos tantos créditos para restaurante y bocadillos, que llenamos una maleta con “Dulces de Goofy”, “barras de Micke”y, dulces de Werther’s Originals (caramelo macizo) y barras de chocolate Ghirardelli…no es que sea queja, por el contrario! Pero si estábamos trayendo tantas cosas de regreso a casa, nos cuestionamos si de verdad pagaríamos por el “plan de comidas”. 

Ahora somos socios DVC y tenemos una asignación de puntos…

los cuales compramos en reventa con la querida Bee Thaxton, siento que incluso hemos recuperado nuestra inversión inicial (con la compra de los puntos) con solo un par de viajes. En este momento, el costo de las cuotas de mantenimiento anuales más el costo de nuestros pases (también anuales) es mucho menor que el costo de un hotel “moderado” por 3 semanas, con nuestro “viejo paquete” que incluía alimentos gratis, esto serían unas £6000, o su equivalente de $7500 USD. Obviamente nosotros tenemos que pagar nuestros alimentos estando en Florida aún con el “plan de comidas” incluido, sin embargo, nuestras anualidades de este año fueron menos de $3000 USD ya con el costo del pase anual, lo que nos dejó unos $2000 USD de presupuesto para otros gastos. 

Mucha gente se preguntará: ¿por qué quieres estar cocinando en vez de estar en los parques? Habiendo estado en Disney durante mucho tiempo cada verano, DVC ha cambiado nuestra forma de hacer las cosas. Procuramos levantarnos temprano para desayunar en el cuarto, antes de salir a alguno de los parques, estamos ahí toda la mañana, a veces comiendo algún bocadillo y/o agua fresca a media mañana. Normalmente nos quedamos hasta la 1 o 2 PM y regresamos al resort. 

Ya en el resort, ya sea los niños o Vikki (mi esposa) van a rellenar nuestros tarros con bebidas (todavía los obtenemos – después de 4 semanas definitivamente recuperas sus valor) mientras tanto yo hago wraps o sándwiches para el almuerzo. Durante la tarde, bajamos a las albercas o a los salones de usos múltiples (lea el blog de Ava) y nos relajamos para recuperar algo de energía, a veces tomamos una siesta o nos sentamos por el balcón y vemos el show de luces veraniegas en el cielo, sí, las lluvias pasajeras. Entrada la tarde, preparo la cena y el té (depende de que tan elegante sea el momento) y uno o dos o todos a la vez salimos a pasar la tarde a los parques. Ocasionalmente comemos en los parques o rentamos un vehículo y salimos a comer fuera de los parques. 

Nuestra curva de aprendizaje el año pasado…

especialmente porque solo nos habíamos hospedado en estudios, así que cambiamos el año pasado para experimentar. Cocino todas las comidas en la habitación, pero no habíamos tenido horno de microondas en varios años, así que fue una prueba. Hemos encontrado muchas cosas que puedo preparar fácilmente en el microondas y que son sabrosas para nuestras comidas: omelets y huevos escalfados (pochados), tocino, pollo, filetes de pollo, papas en gajos, lasaña de microondas (por cierto con mucho más calidad que las tenemos en el Reino Unido), pasta con salsa, verduras y frijoles horneados. Por supuesto, también podemos comer ensalada, aprendí a hacer una ensalada de col sencilla usando aderezo tipo “Ranch”. También hemos encontrado un grupo de alimentos básicos que podemos añadir y así complementar las comidas, como los paquetes de arroz con sabor, pasta y cuscús; “hot pockets” (empanadas para microondas que contienen queso, carne o verduras), los cuales han sido un buen substituto de pizza para nuestros hijos. Al principio puede ser un desafío hacer “malabares” en la cocina con un microondas para cocinar todo al mismo tiempo, pero he aprendido a hacerlo rápidamente. Me gusta pensar que la calidad de la comida que preparo durante las vacaciones, es casi igual a la que preparo en casa, nunca podría ser la misma, pero comemos una dieta buena, saludable y balanceada mientras vacacionamos. 

Tener un refrigerador más grande que las habitaciones normales, también significa que podemos tener diferentes postres como yogures, pasteles (encontramos una gran tarta de lima) y pasteles de queso.

La variedad de cosas que puedo cocinar incluso hospedandonos en los estudios es excelente, el solo hecho de tener un refrigerador más grande (aunque su congelador sea pequeño), un espacio para cocinar (aun si es diminuto), tostador, microondas y un fregadero para lavar. Todavía disfrutamos el salir a comer y las pocas comidas que tuvimos fueron deliciosas, pero gastar entre $ 70 y $ 100 USD en una comida simplemente no se siente bien, especialmente cuando podría estar haciendo otras cosas más emocionantes y/o comprando juguetes o recuerdos con ese dinero. 

A medida que pasaban las vacaciones de este año, llevamos un registro de lo que gastamos en comida, nuestro total de gastos durante cuatro semanas (incluidas 2 comidas en restaurantes, 2 comidas rápidas, un par de comidas fuera del resort y muchos bocadillos en el parque) fue de poco menos de $ 1000 USD.

¿Entonces cuáles han sido los grandes cambios para nosotros como familia?

  • Ahorramos dinero para poder hospedarnos más tiempo.
  • Nuestras vacaciones son más flexibles, no planeamos nuestro día basado en la disponibilidad para los restaurantes.
  • Nos hemos permitido quedarnos en hoteles que de otra manera no podríamos solventar (solíamos quedarnos en los “moderados”).
  • No desperdiciamos comida que no queremos o deseamos cuando salimos a comer. 
  • Comemos de una forma más balanceada y nutritiva a comparación de otras estancias. 

Sé que no todos van a Florida por tanto tiempo; sin embargo, las habitaciones de DVC le ayudarán a  ahorrar dinero para otras cosas en vez de comida. Si ese dinero ahorrado le permite hospedarse por un día más con toda la “magia”, ¡creemos que vale la pena! Estoy seguro de que en algún momento en el futuro, a medida que nuestros hijos crezcan, volveremos a intentar el “plan de comidas” o tal vez queramos comer en los restaurantes o parques. Pero por ahora (para nosotros) tener una forma de ahorrar dinero, preparar nuestra comida y pasar más tiempo en Florida es definitivamente la mejor manera de visitar Disney.